domingo, 16 de agosto de 2015

EUROPA ORIENTAL

República Bolivariana de Venezuela
Universidad Nacional Experimental Marítima del Caribe 

PAÍSES ORIENTALES DE LA UNIÓN EUROPEA

POLONIA

País de Europa Oriental integrante de la Unión Europea. Sus límites son el Mar Báltico al norte, la República Federal Alemana al oeste, Bielorrusia y Ucrania al este, Rusia al noreste y la República Checa y la Eslovaca al sur. Su capital es Varsovia.
El clima es templado continental, de amplitudes térmicas acusadas, que van agudizándose según una
componente oeste − este. Los inviernos son de larga duración y crudos, y los veranos suaves, con algunos días calurosos. Las precipitaciones, decrecientes según la componente norte − sur, son bastantes superiores en las áreas montañosas. En todos los lugares son más abundantes en verano.

Recursos turísticos

Polonia cuenta con recursos naturales de playa, de montaña y de Parques Nacionales. Los Parques Nacionales protegen muy diversos ecosistemas. El más conocido es el de Bialowieza, poblado por numerosos ejemplares de bisonte europeo, caso único en el continente. Esta especia genera una muy
rentable actividad de caza, en cacerías organizadas de alto coste. También hay inmensos bosques, entre innumerables lagos, en las llanuras de Pomerania y de Mazuria. Por su parte, las actividades de montaña se concentran especialmente en los Montes Tatra, la parte más bonita y espectacular de los Cárpatos, con una muy extensa parte declarada Parque Nacional para proteger unas muy especiales fauna y vegetación. Zakopane es, en esta área, el más famoso centro invernal y estival. Tampoco
deben dejar de citarse los abundantes balnearios en los Sudetes, de aguas termales mineromedicinales. El turismo de playa se desarrolla a lo largo de los litorales del Mar Báltico, ocupados por excelentes centros playeros de amplios arenales como, por ejemplo, Sopot. Interesante es la desembocadura del Vístula, así como la laguna de Stettin. Ocupa lugar relevante la región de los lagos Mazurianos, entre los que se insinúan
bellos bosques. Más atrayentes resultan aún los recursos culturales, apoyados en ciudades histórico − artístico −monumentales: Cracovia, Patrimonio de la Humanidad, es un muy importante centro histórico y religioso. Única ciudad respetada por la Segunda Guerra Mundial, mantiene su renacentista castillo de Wawel, con su atrayente patio, colecciones de arte y Tesoro de la Corona; su catedral gótica; sus fortificaciones; sus iglesias, por ejemplo, la gótica de la Virgen María, etc., en un puro ambiente arquitectónico de ciudad renacentista y medieval. En éste sobresale la archifamosa Plaza del Mercado de 1550, símbolo turístico de la región y corazón de Cracovia.
Cerca se localiza el Santuario de Czestochowa, muy visitado por peregrinos − turistas de toda Europa pare rendir homenaje a la Virgen Negra, patrona de Polonia, en el Monasterio de Jasna Gora. En Poznan, al oeste del país y capital del estado en la Edad Media, destaca la soberbia plaza del Mercado
Viejo. Cuenta, además, con iglesias y palacios góticos, renacentistas, barrocos y neoclásicos.
Importante centro histórico, de particular belleza, es la ciudad de Gdansk ( el histórico Dantzig ) en el golfo de su nombre y unida físicamente con Gdynia, reconstruida enteramente con gran fidelidad tras su total destrucción en la II Guerra Mundial. 
       Varsovia, Patrimonio de la Humanidad, arrasada durante la guerra, ha sido fidelísimamente reconstruida en sus estilos y ambientes renacentistas, muy especialmente la Plaza del Mercado Viejo. También pueden contemplarse la catedral gótica, el castillo y bastiones medievales, varios palacios barrocos y neoclásicos, entre los que sobresalen el Palacio Real, y múltiples iglesias. El Parque Real de Lazienki es un magnifico lugar, aprovechado como paseo por los varsovianos. En las afueras es visitado el Palacio Wilanow,  hoy parcialmente museo.

REPÚBLICA CHECA Y REPÚBLICA ESLOVACA

Países centroeuropeo − orientales, integrantes de la Unión Europea, resultante de la escisión de la precedente República de Checoslovaquia. La República Checa, con capital en Praga y formada por los territorios de Moravia y Bohemia, limita al oeste con la República Federal Alemana, al sur con Austria, al este con la República Eslovaca y, al norte, con Polonia y la República Federal Alemana.
La República Eslovaca, con capital en Bratislava, limita al oeste con la República Checa y con Austria, al sur con Hungría, al este con Ucrania y, al norte, con Polonia. Los dos países tienen clima templado continental, con oscilaciones térmicas muy marcadas y con muchos matices regionales, generados por el factor montañoso. El verano tiene temperaturas medias entre 18º y 22º, y el invierno entre 0º y 8º. Ambos registran las máximas precipitaciones en los meses de verano, si bien las lluvias pueden aparecer en toda época.

Recursos turísticos

La naturaleza es uno de los principales recursos, por lo que está protegida en varios Parques Nacionales y Reservas Integrales. Los paisajes de montaña son espectaculares. Aquí se extienden los Montes Tatra, los Gigantes y los Sudetes, marcados para actividades de esquí, veraneo, alpinismo, senderismo, turismo verde, caza, etc. También destacan manifestaciones de modelado cárstico, con sus grutas, simas, poljés,  en  Eslovaquia y en el área checa de Brno. Especialmente relevantes son, en la República Checa, los numerosos balnearios. Míticos son, entre otros, el balneario de Karlovy Vary, especialmente aristocrático y más conocido como Karlsbad, quizá el más famoso del Mundo; y el de Mariánské Lázne, conocido internacionalmente como Marienbad. Es mundialmente imitada la cerveza de Plzen. Nadie discute que es la de mayor calidad a escala universal (Pilsen Urquell o Gambrinus ). En Ceské Budejovice se elabora la indiscutible Budwaiser. Casi lo mismo puede decirse del cristal de Bohemia, puntero ejemplo mundial de la artesanía del vidrio. El más prestigioso ejemplo de talladores de vidrio se localiza en Karlovy Vary.
En cualquier núcleo de Chequia o de Eslovaquia las cervecerías son verdaderos templos, y también por su mobiliario y decoración. Praga y otros centros de interés.
Dominada desde el Hradcany por el variado conjunto de monumentos que integran el denominado Castillo de Praga ( Prazsky Hrad ) y surcada por el río Moldava, es una de las más bonitas ciudades de Europa. Está adornada por 500 torres, plazas, callejas retorcidas, 18 puentes, monumentos románicos, góticos, barrocos. y una soberbia Catedral. Afortunadamente se libró de las destrucciones de la II Guerra Mundial.
En la orilla derecha del río se asienta la Ciudad Vieja ( Staré Mesto ), origen del núcleo urbano, al norte de la Ciudad Nueva ( Nové Mesto ), mientras que en la orilla izquierda se desarrolló el Barrio Nuevo ( Malá Strana), barroco y aristocrático. La Torre de la Pólvora (Prasná Brána ), abundante en estatuas del gótico, es el punto de acceso a la Ciudad Vieja. Ambas orillas del Moldava están unidas por el archifamoso Puente Carlos (Karluv Most ), adornado por treinta y una estatuas barrocas y con entrada / salida bajo vistosas torres. Es el lugar de paseo popular y de reunión y exhibición de artesanos, de vendedores ambulantes, de músicos, de pintores, Carlos IV magnificó la ciudad con la más antigua Universidad centroeuropea, de extraordinaria Aula Magna;
la Catedral de San Vito, así como la Basílica de San Jorge, románica pero con fachada barroca. En la Plaza de la Ciudad Vieja está la Iglesia de Santa María de Tyn. La Plaza ( Staromestké Námesti ) sorprende por la extraordinaria belleza de sus multicolores y muy adornados edificios. Era el mercado antiguo y hoy está ocupada por restaurantes, bares y cervecerías, con sus terrazas.
Pero el centro sentimental de la ciudad se sitúa en la plaza del ayuntamiento, en la Ciudad Vieja. No obstante, la movida y las actividades comerciales, culturales y sociales, y varios hoteles, se concentran actualmente en la plaza San Wenceslao, presidida por el Museo Nacional, mientras que las tiendas de marca, las más excelentes cervecerías, las oficinas de servicios turísticos,  se disponen en la atrayente calle de París. Posteriormente al rey Carlos fueron levantados el Belvedere y el palacio Schwarzenberg. El primero forma parte también del Castillo de Praga y es el más perfecto monumento renacentista de toda Centroeuropa. En el estilo barroco sobresale la iglesia de San Nicolás, varios palacios del Barrio Nuevo y el Klementinum, convento jesuítico, hoy Biblioteca Nacional.
Entre bosques e incomparables ambientes naturales se llega al castillo de Karlstein, habitual excursión desde Praga. Bratislava, la capital de Eslovaquia, fue ciudad húngara hasta finales de la I Guerra Mundial. Emplazada en la orilla izquierda del Danubio, destaca por su armónico urbanismo, reconstruido tras la II Guerra Mundial; por su Catedral gótica, de interior barroco; por su Iglesia de San Francisco; por el Ayuntamiento del siglo XV y por su muy deteriorado castillo renacentista y barroco. Todo territorio de Chequia y de Eslovaquia está sembrado de desiguales castillos medievales. El más famoso es el de Hluboká e igualmente destacables son los de Karlstein y Konopiste.
La propia ciudad de Plzen merece una visita, aparte de por su cerveza, porque luce un casco histórico con más de treinta monumentos y una valiosa catedral gótica. Pero realmente la máxima corona de la Edad Media se encuentra en la bohemia Ceský Krumlov, Patrimonio de la Humanidad. Su castillo es un monumento simplemente colosal−


HUNGRÍA

País de Europa Centro − Oriental, integrante de la Unión Europea, con capital en Budapest. Limita al sur con Servia y Croacia, al oeste con Eslovenia y Austria, al este con Rumania, al noroeste con Ucrania y al norte con la República Eslovaca. Conoce un clima netamente templado continental de fuertes oscilaciones térmicas, con inviernos crudos y veranos bastantes calurosos. Las lluvias más frecuentes se producen en mayo y junio, y en octubre y noviembre.

Recursos turísticos

Desde hace mucho tiempo Hungría ya era conocida por el especial atractivo de Budapest, por la variadas posibilidades que ofrecía el gran lago Balatón y por los numerosos balnearios en las faldas de las montañas. Recursos importantes han sido siempre la caza y la contemplación del genuino paisaje, en especial del inmenso páramo del esta del país, conocido como puszta, amén de, por descantado, la visita a ciudades monumentales. Los recursos turísticos naturales se centran en los grandes bosques, en el lago Balatón, en la aludida llanura húngara y en los balnearios de agua mineromedicinales. Los recursos naturales se hallan protegidos en varios grandes Parques Nacionales y en numerosas Reservas protegidas. Destaca el Parque de Hortobágy, próximo a Debrecen.
Los balnearios son numerosísimos. Aparte de los de la capital, son muy frecuentados los de Debrecen y los de Balatonfured y de Héviz, junto al Balatón. Budapest y otras ciudades históricas.
La capital de Hungría es uno de los más clásicos y tradicionales destinos turísticos. Sin duda alguna, emana un consistente atractivo. En la Edad Media había dos núcleos totalmente independientes : en la margen derecha del Danubio, sobre varias colinas, se instalaba Buda, residencia habitual de los monarcas y de las clases nobles y aristocráticas.
En la margen opuesta, Pest era la sede de los mercaderes y, actualmente, de la administración. En el siglo XIX ambos núcleos se fusionaron, conectados por ocho puentes, algunos tan famosos como el de las Cadenas, el de Elisabeth o el de la Libertad.
Budapest, centro amalgamador de la más original y exótica civilización, la magiar, de remotos orígenes asiáticos, es otro de los corazones culturales europeo − centroorientales.
Cuenta con dos universidades, varios teatros, varios auditorios de conciertos, un completo Museo de Bellas Artes y un excepcional Museo Nacional con obras de Goya, Velázquez, El Greco, Rafael, Tiziano o Tiépolo, entre otros grandes maestros.
En Pest todo gira alrededor de la Plaza de la Libertad, más conocida como de los Héroes, con su monumento al Milenio. Entre sus más representativos monumentos está el Palacio del Parlamento, en un estilo neogótico. Especial relieve tiene el Milenio, así como la Basílica de San Esteban.
En Pest, las funciones urbanas tradicionales no han variado, salvo en el estilo. Aquí se localizan los grandes hoteles, los bancos, los cines, las dependencias ministeriales, etc. Sus calles, muchas cerradas al tráfico, acogen el comercio más selecto con sus boutiques, almacenes, restaurantes y cafés, representadas especialmente por la Utca Váci. Singulares connotaciones emocionales para los húngaros tiene la Plaza Vörosmarty, hervidero de artistas ocasionales y en la que el café Gerbeaud es la más selecta y elegante muestra del Budapest tradicional, con, además, una insuperable reposteria.
También es Pest se emplaza el bellísimo edificio de la Ópera, el inmodificado Barrio Judío y la estación ferroviaria, en vidrio y hierro. Visita obligada por su estructura arquitectónica, su novecentista decoración, su gastronomía y ambiente, es la del restaurante New York, denominado durante el período comunista Hungarian. En plena impresión de este libro ha sido clausurado.
En el sector de Buda, núcleo histórico, debe visitarse el Palacio Real, sede de museos como la Galería
Nacional, la iglesia de Matías o de la Coronación y, en su inmediaciones, el pastiche del Bastión de los Pescadores, destino obligado de todos los turistas. Es un conjunto artificial de torres y de almenas ajeno a la cultura autóctona. Buda es la auténtica ciudad histórica y monumental, y la mejor atalaya para obtener una visión de conjunto de la urbe y de los puentes sobre el Danubio.
Entre Buda y Pest se emplaza la isla Margarita, en mitad del río, el mayor parque natural de recreo de la ciudad y sede de un balneario de aguas sulfurosas.
Budapest es famosa por sus balnearios. Abundan los hoteles e instalaciones de baños sobre manantiales de aguas mineromedicinales. En la parte de Buda nadie desconoce el hotel Gellért, con las piscinas balnearias de mayor enjundia y tradición. Entre las ciudades húngaras más relevantes pueden citarse: Mohács .− con catedral de fuertes reminiscencias históricas conectadas a los monarcas húngaros. Su Carnaval es famoso en toda Europa. 
Sopron .− con la arquitectura popular mejor conservada de todo el país y, quizá, su más bella ciudad.
Luce edificios medievales, góticos, renacentistas, barrocos y neoclásicos, y también dos sinagogas. 
Pécs .− capital en el sur de la nación, antigua capital romana de Panonia y sede de la más antigua
Universidad magiar. Largamente ocupada por el imperio otomano, conserva legados de esta
civilización. Su catedral está flanqueada por cuatro grandes torres. 
Szentendre ( San Andrés ) .− en el codo del Danubio y atrayente excursión desde Budapest, es la ciudad auténticamente turística por su paisaje urbano, por la constante presencia de artesanos y de artistas y por la afluencia de viajeros. Dispone de dieciséis museos. En la Plaza Mayor luce una cruz
conmemorativa del siglo XVIII.
Esztergom .− antigua capital del país, con grandios Basílica, coronada por una cúpula de cien metros
de altura. Muestra también las ruinas del Palacio Real y de la Ciudadela.

 RUSIA Y UCRANIA


RUSIA


Inmenso estado sucesor de la antigua Unión Soviética, de la que se independizaron muchos territorios, pero aún es el de mayor extensión superficial del mundo, asentado sobre la Europa Oriental y todo el Asia Septentrional. Su capital es Moscú. Limita por el sur con Georgia, Azerbaiján, Kazajstán, China, Mongolia y Corea del Norte; por el suroeste con los mares de Azov, Negro y Caspio; por el oeste con Bielorrusia y Ucrania; por el noroeste con el Golfo de Finlandia ( Mar Báltico ), Noruega, Finlandia, Estonia y Letonia; por el norte con los mares de Blanco, Barents, Kara, Laptev y de Siberia Oriental, en el Océano Glacial Ártico; por el este con los mares de Bering, de Ojotsk y de Japón, en el Océano Pacífico.
La inmensidad del territorio ruso explica la inagotable variedad y heterogeneidad de paisajes y de medios geográficos, realmente fascinantes. Quizá el más interesante sea el de la Tiaga, extensísimo bosque boreal de coníferas. El clima es un auténtico paradigma del templado continental, sólo tenuemente suavizado en las proximidades del Mar Negro y, algo menos, del Océano Pacífico. Salvo en el norte, de fríos perennes, los veranos pueden ser bastantes calurosos, aún cuando generalmente suaves. Los inviernos son muy crudos y de muy larga duración. Escasa precipitaciones bajo forma de nieva se registran en invierno y poco superiores, de forma tormentosa, en verano.
Moscú y San Petersburgo.
La capital de Rusia toma como principal centro urbano y turístico la Plaza Roja, en la que se emplaza el Kremlin, complejo de edificios rodeado de torres y murallas y marco de monumentos, catedrales, el tesoro de los Zares, el postrevolucionario Palacio de Congresos, también está la tumba de Lenin, los grandes almacenes Gum y la Catedral de San Basilio. Fuera ya de la plaza, frente al Kremlin, está el Museo Pushkin de Artes Plásticas y, en la Plaza Sverdlov, el mundialmente conocido Teatro Bolshoi. Moscú es una ciudad auténticamente plagada de museos, de teatros y con originales iglesias, como la de la Resurrección, la de San Nicolás el Tejedor o la Catedral de la Epifanía.
Todo el centro tradicional está encinturado por una amplia calle de circunvalación, de cambiantes nombres a cada tramo, en cuyo interior la calles se disponen creando un arquetípico plano radioconcéntrico. La revolución comunista levantó, con fines de prestigio, inmensos edificios como el Hotel Rusia, el de mayor capacidad de Europa; el Hotel Ucrania y los ostentosos rascacielos de la Universidad y del desaparecido Comecom ( Consejo Económico de Ayuda Mutua de los países comunistas ). San Petersburgo es una de las más armónicas y originales ciudades del mundo, totalmente diseñada en gabinete por decisión del Zar Pedro el Grande, siguiendo los principios urbanísticos y arquitectónicos barrocos y neoclásicos. Hasta el triunfo de la revolución bolchevique, tras el que cambió el nombre por el de Leningrado, fue la capital del Imperio Zarista.
Sobre 44 islas, vertebradas por el río Neva y varios canales con sus respectivos puentes, dispone sus arterias y plazas para lucimiento de monumentos. Entre la multitud de éstos sobresalen : la Plaza del Palacio.



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